RETO 1: Ataquemos los bajos fondos de la cocina

Bueno, bueno bueno, pues vamos a empezar con nuestro proyecto organizativo comunitario.

Esto funciona así:

Cada miércoles os planteo un reto pequeñito, algo que podemos organizar en la semana.

Será algo realista, es decir, que tendré en cuenta que la mayoría tenemos vida más allá de la casa, que tenemos algún que otro salvajillo al que atender, y los más afortunados, incluso algo de vida social y trabajo remunerado.

Yo elijo un punto de mi casa que ande dejado de la mano de Dios y necesite un poquito de cariño, os pongo una foto de esas tristes oscuras y cutres que dan mucha pena y con un letrero que dice "antes" os cuento lo que quiero conseguir , y os doy algunas ideas que tenga en mente para hacerlo.

El que quiera se apunta al reto con un comentario en la entrada.

El lunes siguiente, os cuento cómo me ha ido, os pongo las fotos del proceso y del resultado. Bonitas, lustrosas blanquitas y con el letrero de "después".

Si he utilizado etiquetas, o algún imprimible que sea hecho por mi (por aquello de los derechos de autor), lo pongo en PDF para que os lo podáis descargar y usar vosotros si os viene bien.

Al siguiente miércoles, y antes de proponer el siguiente reto, publico las fotos que hayáis mandado vosotros (si queréis claro). Y así otra semana más la misma mecánica, hasta acabar con una habitación o un tema.

Estoy pensando recurrir a expertas para temas concretos, que nos den unos consejos que nos puedan venir bien. Por ejemplo, el día que hablemos de organizar y conservar los cosméticos, pues llega Aída, que es una esteticista fantástica y que sabe mucho de esto (su blog es Cosmetízate en casa) y si tiene un ratito (ya te he liado Aída) y ganas, pues ella me manda unos consejillos, y yo os los paso... Que hablamos de organizar la nevera, pues seguro que hay un par de expertos por ahí ¿a que sí papá? (según él, mi padre es el primer maleno del grupo de malenis), para las comidas semanales y de congelador, mi prima Fátima es una experta y así nos vamos ayudando unos a otros hasta que todos tengamos unas casas supermegaorganizadas.

¿Y para qué queremos una casa megaorganizada? ¡Qué aburrido! ¿no?

Pues no, porque aunque circule por ahí una imagen como ésta 

Lo siento, esta foto la saqué de Facebook y no sé de dónde viene, si el autor de esta bonita y antigua ilustración resucita y me quiere demandar, por favor que no lo haga que tengo tres bocas que alimentar.

Traduzco para los que tuvieron francés en el cole: 

"Una casa limpia es señal de una vida malgastada"

Yo creo que es más bien lo contrario, una casa desordenada nos hace perder no solo energía, sino muchos, muchos minutos preciosos de nuestro día a día que podríamos usar para cosas verdaderamente importantes como jugar con los niños, tomarnos un café, salir por ahí, ir al zoo, leer un libro, rascarnos la barriga o tumbarnos a la bartola un rato cada día sin mala conciencia. 

Cuando la casa funciona porque en ella reina el orden (y no me refiero al superficial, ese no es tan grave y tiene fácil arreglo), sino al  interno (no hay armarios atestados, la cocina es práctica y se recoge rápido porque no está abigarrada, no se acumula la ropa sucia, los papeles importantes están todos juntos y aparecen cuando se los necesita, los juguetes tienen una casita adonde volver después del duro trabajo etc etc), las tareas que tenemos que hacer en ella, se hacen mucho más rápido, sin tanto estrés y sin tener que perder cada día tiempo y nervios para encontrar lo que necesitamos.

También para la salud mental: no es sano tener que estar intentando acordarse donde dejó una la última vez la grapadora, el bolso o o o... . Se gastan las neuronas y se pone muy mala leche, con lo cual también estamos más feos.

El orden también sirve para que los niños no aprendan tacos. 

¿O no juramos en arameo cada vez que tenemos que ir por ejemplo al médico y no encontramos la cartilla?.

Creo que si estáis todavía leyendo este rollo tan largo es porque no necesito convenceros más, así que vamos a empezar.

RETO 1: LOS BAJOS FONDOS DE LA COCINA

Para empezar con nuestro proyecto, he pensado en algo pequeño. Quiero ser realista y proponer cosas que pueda cumplir para no fallaros el lunes.

Este finde vienen los papis del guiri, así que no puedo prometer nada del tipo "armario de mi habitación" (uf! se me abren las carnes sólo de pensar el día que toque este punto... )

El otro día estaba maquinando cuál podría ser el primer reto, cuando pasó Zape corriendo y casi me caigo muerta.

Es lo que tiene usar todavía dodotis cuando ya uno se mete un chuletón con patatas entre pecho y espalda, pues que el asunto es mortífero. 

Pregunté ¿Zape tienes caca?, pregunta retórica donde las haya. 
Nooo (respuesta estándar del interpelado sea cual sea la pregunta)

Salió escopetado huyendo de la quema pero en un golpe maestro lo enganche de la cinturilla y me lo llevé a cambiar. 

No exagero si os digo que paseé el pastel por toda la casa durante más de cinco minutos buscando una dichosa bolsa de basura para echar aquel arma de destrucción pituitaria. 

Hasta se mustiaron un par de plantas.

¿Y por qué? porque no estaban donde tenían que estar y donde tenían que estar había un rebullo tremendo y no cabían las bolsas.

Así que decidido: El primer reto consiste en ordenar el mueble de debajo del fregadero. Ese donde guardamos las cosas de limpieza, los guantes de fregar, los estropajos etc etc etc. 

Bueno, en mi caso está debajo del fregadero, igual vosotros lo tenéis encima del horno, da igual, pero ese armario donde guardamos todas esas cosas ¿vale?.
Sí, ya sé que es más glamuroso empezar con el tocador o el vestidor o esas cosas que tiene la gente bien, pero hemos quedado en que esto es un blog de gente normal, de la de toda la vida, que es más probable que tenga un fregadero con un mueble debajo que una "craft room" (¿como demonios se traduce esto?)

Ideas:

- He visto muy buenas ideas en la página de Jennifer Jones, "I heart organizing", aunque vienen en inglés, hay muchas fotos aquí  y aquí. 

- Yo siempre sigo el mismo proceso:

1. Pienso qué necesito meter ahí y me hago una lista o un dibujo. En este caso las cosas para fregar, los estropajos, los guantes, las bolsas de basura, las bayetas, las pastillas del lavaplatos etc...

2. Es más fácil empezar con un lienzo en blanco, saco toooodo lo que haya dentro de ese mueble y lo limpio bien por dentro y lo mido.

3. Teniendo en cuenta lo que quiero meter dentro y lo que mide el mueble, veo que contenedores o cajas serían necesarios. Es importantísimo que sea un sistema fácil de mantener. Si tengo que abrir cuarenta tapas para volver a guardar algo, lo dejaré encima de cualquier sitio (puñetera pereza)

4. Rebusco por casa si tengo algún contenedor que me sirva o que pueda "tunear". Sólo si no he encontrado nada me voy a comprarlo.

5. Esta es mi parte favorita: lo pongo bonito (o cursilón, según el guiri). Es decir, hago etiquetas, forro las cajas, les pongo lazos y moños por doquier, me encanta que las cosas sean además de prácticas, bonitas, si no no me apetece tanto mantenerlo ordenado. Soy una esteta, que le vamos a hacer...

6. Ya por fin relleno todo de nuevo pero ahora bien colocadito

7. Lo miro triunfante, le hago doscientas fotos, abro y cierro mil millones de veces para ver que chulo me ha quedado y lo encantada que estoy de conocerme.

8. Voy corriendo a contarlo en el facebook ;)

Para que os hagáis una idea del "material" con el que cuento, os enseño la foto churripitosa del antes, para que el lunes haga más impresión

Señoras y señores, mi mueble de debajo del fregadero

Atención al dramatismo que le añaden al asunto  la palabra "antes" y el cerquillo de mugre alrededor de la caja de lata, ¡todo un reto si señor!

Bueno, pues con este reto, queda inaugurado el primer gran grupo de retos que formarán el megaproyecto : EN BUSCA DE LA COCINA QUE SE LIMPIE SOLA  BIEN ORGANIZADA

(milagros a Fátima)

Bien queridos y queridas

¿Quién es el valiente que se une?

¿Quién va a mandarme las fotitos más impactantes?

¿Quién pasa del mueble de debajo del fregadero y prefiere irse de cañitas?

Contadme y...

¡qué tiemblen esos fregaderos que les vamos a atacar por los bajos!